Revisores

GEMINIANO MARTÍNEZ

Fecha: 31 de Marzo de 2022

Edición: Marzo 2022 No. 30

EL REVISOR EN EL PROCESO DE PUBLICACIÓN CIENTÍFICA

Una de las tareas inherentes en el quehacer de cualquier investigador consiste en extender una recomendación bien fundamentada para que una revista científica acepte o rechace publicar una contribución de otros investigadores. Para ser elegible y representar el papel de revisor, el cual demanda una inversión de tiempo considerable, el investigador debe ser autor o coautor de artículos científicos publicados con anterioridad en revistas con arbitraje por pares que lo cualifiquen como un experto en el tema.

Generalmente, la evaluación es del tipo simple-ciego que consiste en que el revisor tiene acceso a la identidad de los autores, pero los autores nunca conocen la identidad del revisor. Sin embargo, recientemente, algunas revistas han tomado la iniciativa de reconocer el esfuerzo de sus revisores y, una vez que el artículo es aceptado, su identidad es revelada y hecha pública junto al artículo evaluado. Dependiendo de la revista, el proceso de revisión puede consistir de una o varias rondas en las cuales los autores dan respuesta, tanto dentro del manuscrito como a través de una carta, a las preguntas, observaciones y sugerencias planteados por el revisor. Tales señalamientos pueden ser etiquetados como correcciones mayores o menores, así como obligatorias u opcionales. Es necesario apuntar que, aún después de este curso de acción, el manuscrito puede ser rechazado si el revisor considera que las respuestas no son satisfactorias ni están bien fundamentadas.

En la búsqueda de estandarizar el proceso de revisión y lograr incrementar la calidad de las publicaciones, un número de editoriales ofrecen cursos para certificar a sus revisores. Aunque no es obligatorio tomar o aprobar esta capacitación para continuar siendo considerado, conocer su contenido es recomendable. Algunos puntos relevantes que pueden tocarse son los posibles conflictos de interés, la necesidad de proporcionar comentarios constructivos al autor aún si la recomendación es el rechazo del manuscrito, así como cumplir con las fechas límites para aceptar ser evaluador y enviar la recomendación. Otros beneficios que ofrecen algunas editoriales para incentivar la participación del investigador en el rol de revisor consisten en el acceso temporal a su colección de revistas relacionadas con el tema del manuscrito evaluado, descuentos en la membresía de una sociedad científica asociada después de acumular un cierto puntaje y/o el reconocimiento de su participación mediante una constancia mencionando el número de evaluaciones. Muchas editoriales tienen un sistema en línea con los apartados que desean que los revisores evalúen y den a conocer su recomendación. No obstante, también es permitido subir al sistema un texto con el reporte. Una estructura funcional para el cuerpo de tal reporte sugerida por algunas editoriales contiene, además de la identificación del trabajo:

(1) Un resumen que refleja el entendimiento detrás de la idea propuesta por los autores. (2) Los comentarios que permitan mejorar la presentación del manuscrito (3) Finalmente, la recomendación para aceptar o rechazar el manuscrito en su forma actual.

La responsabilidad que recae sobre los hombros del investigador cuando acepta fungir como revisor de posibles contribuciones que serán publicadas en una revista científica radica en asegurar, con base en su saber, que los resultados son reproducibles, novedosos y con un alto impacto.

Además, contrae un compromiso tanto con la comunidad científica como con el resto de la humanidad, quienes tomarán ese conocimiento calificado como verdadero para seguir desentrañando las incógnitas del universo y desarrollar aplicaciones que mejoren su calidad de vida.